Confianza en la legitimidad democráctica

Primer Trimestre
Boletin de Divulgación
Escrito por: Lic. José A. Saavedra Gil
Visitas únicas: Contador de Visitas Únicas | CDE PAN BCS

En los últimos años México ha manifestado vivir un momento de crisis de credibilidad y confianza sistemática hacia las instituciones mexicanas, esto se ha ido incrementado por una serie de factores sociales, económicos y políticos. Uno de estos factores es el actuar de los políticos y gobiernos, los cuales han dejado sin resolver la inseguridad, la injusticia y la corrupción, siendo una problemática en la sociedad que ha ido debilitando el Estado de derecho, al grado que se ha puesto en duda la propia aceptación de la democracia como la mejor forma de gobierno entre los mexicanos.

La confianza ha sido un elemento esencial entre las instituciones y la ciudadanía para tener una democracia estable y de calidad, pero lamentablemente esta confianza ha disminuido pues la constante descalificación de los actores políticos sobre la actuación del Estado ha formado un clima social de desconfianza e incertidumbre, donde esta realidad ha generado un debate sobre la compleja relación entre democracia y confianza, se han llevado acabó distintas encuestas que ponen en manifiesto que la confianza en las instituciones y las personas se ha ido erosionado como se mostrara en algunos datos publicados recientemente:

La encuesta nacional de confianza realizada a 19 instituciones (Consulta Mitofsky, 2020) dice que del 1 al 10, la confianza ciudadana a las instituciones es calificada con 6.8, siendo las instituciones peor calificadas los partidos políticos (5.3), los diputados y sindicatos (5.7), los senadores (4.9), mientras que el ejército (8.0), las universidades y guardia nacional (7.7) tienen la calificación más alta de confiabilidad.

Por otro lado la encuesta realizada por Latinobarómetro 2018 (estudio elaborado por la organización que lleva el mismo nombre) deja claro que los mexicanos tienen mayor confianza en la iglesia católica (28.4 %) y en las fuerzas armadas (16.1%); pero confían menos en el congreso (2.9%), el gobierno de la nación (1.8%) y los partidos políticos (1.7%).

Estos datos se traducen en la perdida elevada de confianza de la ciudadanía hacia las instituciones y los gobiernos, reflejando un problema que afecta al mismo funcionamiento de nuestra democracia, ya que la relación entre ciudadanía y gobierno está basada en la "desconfianza", haciendo que la democracia y la política se vuelvan difícil y deslegitimada, ocasionando un bajo nivel de participación ciudadana en el voto, la colaboración en campañas o la afiliación a partidos políticos, ya que la ciudadanía no se siente representada.

Al existir la confianza en las instituciones es posible incrementar el apoyo hacia los sistemas democráticos, Noris Pippa señala que la confianza en las instituciones democráticas facilitaría la aceptación de los ideales y valores democráticos en los ciudadanos contribuyendo a generar de manera directa e indirecta apoyo a los regímenes democráticos. Ya que esta confianza es un factor importante para la sociedad y un requisito fundamental dentro de una buena gobernanza en pos del desarrollo del bienestar de sus habitantes, estos facilitaran el desarrollo de relaciones sociales entre los individuos, extendiendo esta confianza hacia la vida pública del ciudadano, sus autoridades, sus instituciones, así como en todas sus relaciones sociales.

La confianza hacia las instituciones se ha convertido en primordial dentro de la relación interpersonal entre los individuos y están relacionados positivamente con niveles más altos en la intervención política, influyendo en la participación y actividades políticas de la ciudadanía desde el voto hasta la forma de organización y movilizaciones de los individuos. Segovia menciona que al alcanzar altos niveles de confianza política en América Latina producen un incremento en las formas de participación no convencional.

Existen diferentes tipos de confianza, por ejemplo:

Confianza interpersonal: Esta confianza es importante ya que en ella los ciudadanos sienten que sus intereses serán atendidos, que las autoridades no estén sujetas a supervisión, presentando efectos positivos en los niveles de confianza hacia las instituciones, así como dar estabilidad en la democracia, facilitando que los individuos actúen de forma colectiva, así esperar que haya una relación estrecha entre confianza interpersonal y confianza en las instituciones a nivel individual.

Confianza social: Esta se asocia en la medida en la que los individuos experimentan su confiabilidad dentro de sus relaciones sociales, manifestándose mediante la participación social, el involucramiento de los ciudadanos en los temas de interés de su comunidad, formando asociaciones, redes y organizaciones, favoreciendo la implicación en asuntos cívicos, al desarrollo de instituciones sociales y políticas, convirtiéndose en un pilar para los procesos políticos y el sistema democrático.

Confianza política: Esta se entiende como un juicio que se le da al funcionamiento de las instituciones políticas y sobre todo al sistema político, lo cual pertenece a la esfera pública y política, Levi y Stoker menciona que la confianza política supone una evaluación positiva de los atributos más relevantes que hacen a cada institución digna de confianza, como credibilidad, justicia, competencia, transparencia y apertura ante puntos de vista distintos.

Cuando existen altos niveles de confianza las personas tienden a sentirse más seguras, con menos preocupaciones y suelen ver a otros agentes sociales como cooperativos, en lugar de competencia (Wilkinson & Pickett, 2010). Sin embargo, cuando la relación entre ciudadanía y gobierno se basa en la desconfianza, la democracia se vuelve difícil y las decisiones potencialmente benéficas para la población pueden considerarse negativas.

Se ha demostrado que bajos niveles de confianza están relacionados con actitudes negativas hacia el cumplimiento de las leyes y reglamentos (Tyler, 1992), evasión o disminución del pago de impuestos (Kirchler, Hoelzl y Whal, 2008) y abstencionismo electoral (Cueto Villamán, 2007). Además, se ha identificado que la desconfianza dificulta la percepción de injusticia e inequidad (Oishi, Kesebir y Diener, 2011) lo cual hunde a la autoridad de las instituciones (Kaltenthaler et al., 2010).

Dalton Russell menciona que la desconfianza es producto del cambio de valores sociales predominantes, producido por las nuevas pautas de consumo y relacionamiento social en las sociedades complejas.

Por lo tanto es fundamental que las personas tengan confianza en las instituciones pues estas son las reglas de la interacción social, garantizan el orden y nos ofrecen certidumbre, establecen límites respecto de lo que está permitido y lo que no, por ello es fundamental que las personas las respeten y recurran a ellas.

A pesar de que nuestro país se rige mediante una democracia y que tenemos gobiernos que se eligen electoralmente, no ha sido suficiente para que la ciudadanía tenga confianza, ya que para construir instituciones democráticas es una tarea de mucho más, es necesario tener políticas públicas y económicas que sean creíbles y tengan resultados tangibles, deben inspirarse en el diálogo permanente entre los actores que en ella participan, así como buscar que los actos que hacen quienes ejercen el poder político sean transparentes con quienes les conferimos nuestra voluntad política, pero si eso no existe, aunado a que se empeñan en no hacer las cosas bien y el alto índice de corrupción, es difícil reorientar el camino hacía instituciones más aceptadas.



REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Confianza social, confianza política y satisfacción con la democracia. Consultada en: http://www.reis.cis.es/REIS/PDF/REIS_122_011238570387245.pdf
Confianza y participación política en América Latina. Consultada en: https://www.redalyc.org/journal/421/42159682019/html/
Latinobarómetro. Consultado en: https://www.latinobarometro.org/latOnline.jsp
La confianza en las instituciones México en perspectiva comparada. Consultada en: http://www3.diputados.gob.mx/camara/content/download/258851/774007/file/Confia nza_en_las_instituciones.pdf
Las causas de la desconfianza política en México. Consultada en: http://www.scielo.org.mx/pdf/perlat/v20n40/v20n40a9.pdf
Confianza ciudadana en las instituciones políticas en México: una revisión de la primera década del siglo XXI. Consultada en: http://cdsa.aacademica.org/000-036/165.pdf

TOP